Hipnosis

Hipnosis

La hipnosis no es mas que un estado alterado de conciencia durante el cual nuestros sentidos se agudizan, tenemos acceso a nuestros archivos de memoria y ponemos nuestra atención en los procesos internos que son los que determinan nuestra conducta externa. Además durante este estado estamos más susceptibles a las sugestiones, en especial las positivas que no amenazan nuestros valores establecidos. Es esa capacidad receptiva la que el Hipnoterapeuta o hipnotista aprovecha para la reprogramación de la conducta en el individuo.

El porqué no podemos hacer lo que queremos o comportarnos como quisiéramos es porque obedecemos a impulsos internos dictados por las experiencias y emociones archivadas en nuestra mente subconsciente que son los que determinan nuestra conducta, nuestros valores y principios. Durante un estado hipnótico tenemos acceso a ese archivo de memorias. Con las técnicas necesarias podemos determinar cuando y porqué se creó ese concepto al cual hoy obedece y entonces puede ser modificado y reprogramado de manera positiva o provechosa para el individuo.

Cuando la técnica de hipnosis es usada de manera terapéutica, deseo significar, para el beneficio de la persona en la eliminación de manifestaciones negativas en su cuerpo físico (como son las somatizaciones por ejemplo), cargas emocionales, estados mentales dañinos y compulsiones, es cuando se conoce como Hipnoterapia.

La Hipnoterapia se define como ciencia y como arte. Cuando se trabaja bajo un ambiente clínico, como lo es en la práctica de la Hipnosis Medica Complementaria o la Hipnosis Clínica, se conoce como ciencia. Cuando es trabajada para aumentar la calidad de vida de una persona como lo es el desarrollar una habilidad, mejorar la memoria, eliminar síntomas nocivos aunque no mortales, dejar de fumar y otras muchas mas, se conoce como arte.

Un buen Hipnoterapeuta debe ser una persona con una gran creatividad, seguridad en su práctica y una gran capacidad de escucha. Esta ultima, considero que es el requisito que mejor adorna esta profesión. Hoy en día son pocos los profesionales de la salud que están dispuestos a dedicar horas, no a oír, sino a escuchar una persona.